March 26, 2011 | La Opinion | Articulo original

Significado de una cifra

En Estados Unidos hay 50 millones de latinos, una cifra grande que representa responsabilidades, especialmente para los inmigrantes que componen un porcentaje significativo.

Este número, que va en marcada ascendencia, es también una poderosa señal al establishment político de cuan ligado está el futuro del país al progreso de esta comunidad. Hoy uno de cada seis estadounidenses es latino, al igual que uno de cada tres niños, para el año 2050 ya no habrá una mayoría absoluta racial o étnica sino que habrá las minorías, en gran parte debido al crecimiento de los latinos.

Es preocupante en este contexto que los integrantes de la comunidad latina no estén preparados para ese futuro que los tiene como protagonistas.

Es hora de ver esta realidad y que exista un compromiso oficial a todo nivel para reforzar la educación de manera que se llegue con una mano de obra preparada para ser competitivos. Un sistema de salud sólido para que los jóvenes estén en las mejores condiciones para que sean ciudadanos productivos que alcancen su potencial.

El presidente Obama está obrando acertadamente con la reforma médica y el renovado énfasis en la educación.

Las mejoras en las áreas de salud y educación en la comunidad latina tendrán repercusiones positivas para toda la sociedad. Para ello es necesario dejar de ver a los inmigrantes latinos como una amenaza que hay que extirpar deportándolos, hay que mirar más allá del estereotipo.

Al mismo tiempo, también es imprescindible que los latinos asuman el papel de protagonistas de su destino que les otorga la cifras, de lo contrario los 50 millones darán un falso y frustrante sentido de poder al no lograrse una idílica unidad latina soñada por muchos.

El camino comienza asumiendo responsabilidades para ser una parte activa de esta sociedad. El aprender inglés, por ejemplo, participar en eventos cívicos y comunitarios. El inmigrante debe respetar las leyes y las normas de las comunidades locales del nuevo país. Hay que adaptarse a la nueva tierra sin esperar que el mundo se adapte a uno.

Si se es residente legal, por qué no ser ciudadano y votar en las elecciones para ser una persona con voz en vez de ser un anónimo en una mayoría silenciosa. Se puede protestar todo lo que quiera, pero sin una participación política firme no hay impacto.

La cifra del censo obliga a un compromiso tácito por parte de los gobernantes que tienen la misión de preparar el futuro y de los latinos de hacer todo lo posible para estar listos para ese momento. El destino de Estados Unidos es inseparable del de los hispanos, reconocer esta realidad es un buen comienzo.